Nunca antes había sido tan fácil incorporar el pan integral y todos sus beneficios a nuestro día a día. Nuestro catálogo de variedades integrales se amplía para cubrir todos los gustos, clasificándolas y etiquetándolas de manera clara y conforme a la normativa vigente.
¿Qué aspectos regulan las normativas actuales exactamente? ¿Cuáles son las diferencias más destacables del pan integral con respecto al pan blanco? Estas preguntas y otras son las que vamos a intentar aclararte en este post.
Qué es pan integral
En esencia, el pan integral es aquel que está elaborado con harina de grano entero o completo, a diferencia del pan blanco cuya harina pasa por un proceso de refinamiento en el que sus componentes se separan.
El trigo, como otros cereales, se compone de tres partes:
- Salvado: capa más externa, encargada de proteger la semilla. En él encontramos una alta concentración de fibra.
- Endospermo: cuerpo del cereal donde se concentran los hidratos de carbono (almidón) y, por tanto, la glucosa.
- Germen: es el núcleo de la semilla y donde hallamos la mayor cantidad de nutrientes.
El uso de unas u otras harinas determina la textura y demás cualidades organolépticas del pan que nos llevamos a casa.
Pero cuando hablamos de pan integral, es necesario hacerlo también de otro aspecto importante: la proporción de harina integral que ha sido empleada para su fabricación.
Lo que dice la normativa sobre el pan integral
En 2019, se aprobaba el Real Decreto 308/2019, de 26 de abril, sobre la calidad del pan, poniendo fin a la era del pan con salvado vendido a los consumidores como pan integral. Aquí te contábamos todos los detalles.
Con ella, la denominación “pan 100 % integral” o “pan integral” quedó restringida a los panes elaborados con harina exclusivamente integral.
En los casos en que la harina empleada no sea exclusivamente integral, es obligatoria la mención “elaborado con harina integral X %”, correspondiendo “X” al porcentaje de harina integral sobre el total de harina utilizada en su fabricación.
Por qué elegir pan integral
Los beneficios de optar por un pan integral son de sobra conocidos.
- Su elevado aporte de fibra no solo contribuye a mejorar nuestra salud gastrointestinal, sino que lo convierte en un alimento de lo más saciante.
- Es muy nutritivo. Además de fibra, nos aporta vitaminas del grupo B, E, y algunos minerales, como el magnesio. También contiene riboflavina y zinc.
- Pueden consumirlo las personas diabéticas. Los hidratos de carbono de absorción lenta del pan integral ayudan a regular el índice glucémico y su alto contenido en fibra promueve la secreción de insulina.
Pero hablemos también de sus características organolépticas de manera general:
- Olor más intenso que el del pan blanco.
- Sabor también más ácido, aunque sigue siendo agradable.
- La corteza tiene un color más oscuro y es un poco más gruesa.
- Los alveolos u ojos del pan son de tamaños diferentes. En el pan blanco la miga suele ser más uniforme.
Pan integral para todos los gustos
Tanto si eres un habitual de la textura y sabor integrales, como si tu deseo es iniciarte en un consumo mayor de fibra, en Polvillo tenemos la opción perfecta para ti.
- La nueva incorporación: Barrita campesina integral 30 %.
Recién llegada a nuestro catálogo, es nuestra propuesta con menor porcentaje de harina integral. Perfecta para aquellos que quieren disfrutar de todos sus beneficios, pero con una intensidad de sabor más moderada.
De miga oscura y corteza fina y crujiente, su agradable olor seguro que te conquista.
- Para los que prefieren un término medio:
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- Rombo Restaurante 40 % integral.
- Hogaza 70% integral (20 % de masa madre).
- Panes 100 % integral. Elaborados con masa madre.
Todo el poder de la fibra en diferentes formatos para que puedas dejar volar tu creatividad.
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- Mollete 100 % integral.
- Panvillo 100 % integral (15 % masa madre).
- Romanito 100 % integral (17 % masa madre).
Encuéntralos todos en tu tienda Polvillo más cercana y, ¡a seguir viviendo la vida con el mejor pan!